Detalle de cortes transversales de dos elementos antiguos de mobila.

Los técnicos de AIDIMA, entre otros servicios, realizan análisis en estructuras de madera de todo tipo. Después de muchos de análisis realizados en los cascos antiguos de las poblaciones de la Comunitat Valenciana y después de muchas charlas con los propietarios, carpinteros, trabajadores de antiguas empresas donde la estructura era de madera, etc., puede afirmarse que el término madera de “mobila” es muy común en esta parte de la zona de Levante. A veces también es conocido como pino “melis” o “tea”.

Diferentes elementos de esta madera encontrados en diferentes construcciones de la Comunidad Valenciana.

Diferentes elementos de esta madera encontrados en diferentes construcciones de la Comunidad Valenciana.

Muchas personas creen que la madera que tienen instalada corresponde a mobila. Es cierto que en muchos casos es así, pero en otros, no. Durante estos años, AIDIMA ha encontrado infinidad de combinaciones: edificios donde toda la madera es mobila, edificios donde la estructura secundaria no lo es pero la principal sí, y edificios donde en ninguno de los casos era de esta especie.

Un investigador de AIDIMA, Guillermo Martínez, recuerda que acompañaba a su padre, carpintero, hijo de carpintero y nieto de carpintero, por los derribos de Valencia en busca de la “mobila especial” para limpiarla de clavos, tornillos, metralla de la guerra, etc., y usarla para hacer la carpintería de exterior e interior (puertas, ventanas, muebles, etc.). Para los carpinteros de aquel tiempo, esa madera era tan apreciada como la madera de frondosa tropical para los profesionales actuales.

Lo cierto es que esta madera, la “mobila”, se llamaba así porque venía importada desde diferentes puertos del golfo de México, el más común en los inicios de su entrada, del puerto de la bahía de Mobile (de aquí el nombre utilizado), Tampa, Pensacola, etc., en los estados norteamericanos de Luisiana, Florida o Alabama. Estas importaciones comenzaron a finales del siglo XIX (1880) y finalizaron a principios del XX (1930) y solían descargarse en los puertos de Valencia y en menor medida, en el de Mallorca, donde también se la conoce como “Charleston” o “Nort Vell”.

Es sorprendente que en los análisis de AIDIMA se hayan encontrado vigas de mobila de longitudes de hasta 10 metros en algunas viviendas y en algunas naves industriales de Valencia. Y es que una de las características de esta madera, que proviene de 4 especies (Pinus palustris Mill, Pinus taeda L., Pinus elliottii Engelm, Pinus echinata Mill., de mayor a menor importancia), es la posibilidad de obtener madera de grandes dimensiones, gracias a su largo fuste, a su pequeña copa (en comparación con otros pinos) y su limpieza de nudos (ramas).

Además, la madera que se cortaba en dichos estados norteamericanos era madera de crecimiento lento, y se obtenían grandes piezas sin albura prácticamente, y por tanto muy resinosas. Debido a esto, en algunos casos se han medido densidades superiores a 1000 kg/m3, y clasificaciones estructurales bastante más altas de C45, algo no muy común en el mundo de las coníferas. Además tiene una durabilidad natural muy superior a las demás especies usadas, tanto frente a los hongos y la carcoma, como a las termitas.

Por este hecho, hay que diferenciar la mobila que se importa actualmente, proveniente de cultivos, con unas características bien distintas, de la mobila que fue importada a principios del siglo XX. Por ello, en el mundo de la carpintería se diferencia entre “mobila nueva” o “pino melis”, de menor calidad, y “mobila vieja”. Una de las diferencia es el grosor de los anillos y el color de la madera (pequeños y de color rojizo en la mobila vieja).

Por otro lado, para diferenciar la mobila de las especies autóctonas españolas, uno debe fijarse en el grosor y la diferenciación de los anillos de invierno en relación a los anillos de verano (como puede verse en las imágenes).

En algunos de estos edificios, sobre todo en los que su construcción data de principios de siglo XX, AIDIMA ha encontrado inscripciones referentes a los aserraderos, las empresas de exportación y los puertos de origen de la madera, como por ejemplo: DENDINGUER TAMPA, FLORIDA, D.R Mc INNIS EXPORT CO 88 GULFPORT MISS, etc.

Dos investigadores de AIDIMA, Guillermo Martínez y Guillem Segura, están buscando más información sobre el uso de la mobila en la Comunidad Valenciana y su importación desde el origen, para publicar un estudio al respecto.

Detalle de inscripciones sobre la información de los exportadores, en dos elementos antiguos de mobila.

Departamento de Tecnología y Biotecnología de la Madera

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Más información sobre estos servicios en: Servicio de Inspección y Diagnosis de Madera Estructural